martes, 24 de diciembre de 2013

Clasificación de las razas

Existen dos grandes asociaciones a nivel mundial que clasifican las razas de perros:
Cada país se rige por una asociación (aunque también puede tener la suya propia) y cada asociación clasifica y reconoce las distintas razas de perros. Así por ejemplo la AKC reconoce a algo más de un centenar de razas, mientras que la FCI (a la que pertenecen casi todos los paises europeos y latinoamericanos) reconoce más de 350 razas diferentes.
La FCI (considerada como el standard mundial) distingue las razas de perros en 10 grupos:
  • Grupo 1: Perro de pastor y perros boyeros (excepto perros boyeros suizos)
  • Grupo 2: Perros tipo Pinscher y Schnauzer - Molosoides - Perros tipo de montaña y Boyeros suizos y otras razas
  • Grupo 3: Terriers
  • Grupo 4: Teckels
  • Grupo 5: Perros tipo Spitz y tipo primitivo
  • Grupo 6: Perros tipo sabueso, perros de rastro (menos lebreles) y razas semejantes
  • Grupo 7: Perros de muestra
  • Grupo 8: Perros cobradores de caza - Perros levantadores de caza - Perros de agua
  • Grupo 9: Perros de compañía
  • Grupo 10: Lebreles
Cada grupo a su vez se divide en secciones y subsecciones.
La AKC divide las razas en siete grupos:
  • Grupo 1: Sporting group
  • Grupo 2: Hound group
  • Grupo 3: Working group
  • Grupo 4: Terrier group
  • Grupo 5: Toy group
  • Grupo 6: Non-sporting group
  • Grupo 7: Herrding group
Existen otras asociaciones como: UKC (United Kennel Club), CKC (Canadian Kennel Club), ANKC (Australian National Kennel Club), NZKC (New Zealand Kennel Club) ....
Cada una de las asociaciones cinófilas impone unos requisitos para reconocer nuevas razas de perros. Dichos requisitos están relacionados con la uniformidad de los ejemplares y el número de ellos. Una vez reconocida una raza, la asociación realiza el standard de la misma, donde se fijan las principales características: color, pelo, tamaño, proporciones...

lunes, 23 de diciembre de 2013

LA SARNA EN LOS PERROS

Hay varios tipos de sarna que afectan a nuestros perros. Una de ellas es la sarcóptica, que se contagia por contacto directo con un perro afectado. También por contacto con parásitos sueltos en los materiales de la cama, sábanas, etc.

Normalmente las lesiones se localizan zonas deficientes de higiene: en los codos, tarsos, abdomen y bordes de las orejas. Se ve la piel inflamada, rojiza, con zonas sin pelo, como con “caspa”, y olor fuerte como “a perro”. Se puede transmitir a los humanos, si tienen sus defensas bajas y no se higienizan las manos luego de tocar al perro.

La sarna demodéxica no está asociada a esos lugares pobres en higiene, sino que afecta a perros con su sistema inmune débil o poco desarrollado (cachorros). En perros sanos no causa daño alguno, “convive” con ellos. Los cachorros pueden contagiarse de la madre por contacto directo, ya que este género no sobrevive fuera del perro.

Si aparecen lesiones, éstas se aprecian primariamente alrededor de la cabeza del cachorro, ya que es el área de mayor contacto con la madre. Existe una forma localizada en la cabeza y si el estado inmunitario es pobre, puede generalizarse afectando toda la superficie corporal.También posee olor fuerte.

Otro tipo de sarnas son las que se encuentran en las orejas del perro (también en gatos). Corresponde al género Otodectes y tiene gran parte de la culpa cuando nuestros perros sufren otitis. Provoca mucha picazón, piel descamada dentro de las orejas, dolor por infecciones bacterianas secundarias, enrojecimiento e hinchazón y mucho cerumen.

El tratamiento debe ser indicado por el veterinario, luego de llegar al diagnóstico de la enfermedad. En el caso de la sarna de las orejas debe primero limpiarse muy bien el conducto auditivo ya que las gotas que deberemos ponerle deberán entrar en contacto con los ácaros sin que se interpongan otros elementos.

Para los tres tipos de sarna existen también otros tratamientos locales e inyectables, estos últimos son muchísimo más fáciles de administrar y confiables. Se aplica una o dos inyecciones contra sarnas y en quince o veinte días veremos los resultados. Otros tratamientos incluyen soluciones para baños, sprays, untar al perro (cachorros) con vaselina (la capa que deja sobre la piel “asfixia” a las sarnas). Este método es muy utilizado en cachorros y gatitos ya que las lociones o inyecciones pueden ser peligrosas si tienen menos de tres meses de edad.

Se recomienda NO utilizar los inyectables antisárnicos sin previo consentimiento del veterinario, ya que hay edades, estados de salud y razas (por ejemplo Collie) que correrán peligro de muerte si los aplicamos en ellos. Para terminar, nunca, pero nunca, usemos querosén o aceite quemado para tratar una sarna. Las mata, en efecto, pero el perro primero deberá sobrevivir a la grave intoxicación para que veamos esos resultados.

Sarna: contagio en humanos

La sarna canina es contagiosa, no solamente de un animal otro sino también para los humanos. Mientras en otros perros el contagio se desarrolla de manera agresiva, extendiéndose, en los humanos tal cosa no sucede.

Solo se manifiesta en forma de una pequeña roncha que puede infectar otra parte cuando uno se rasca y muda el ácaro, pues pica mucho.

Si bien en apariencia no es mucho lo que afecta la sarna en humanos, no está demás cuidarse de tener contacto con los perros si lo tienen.

El tratamiento puede ser aplicado mediante una loción para piojos
, pasándolo por la zona afectada. Las posibilidades de eliminar definitivamente la sarna por este medio es muy efectiva.

Dentadura Canina

La dentadura canina consta de 28 piezas dentales de leche y 42 piezas en la edad adulta. La disposición de las piezas es la siguiente (en la edad adulta):

Arcada superior:
-Incisivos: 3+3
-Caninos: 1+1
-Premolares: 4+4
-Molares: 2+2

Arcada inferior:
-Incisivos: 3+3
-Caninos: 1+1
-Premolares: 4+4
-Molares: 3+3


La dentadura de leche tiene la misma disposición pero careciendo de molares y con 3+3 premolares en ambas arcadas. El cambio de dentición comienza en torno a los 4 meses, dependiendo de las razas, y termina hacia el medio año de vida. En razas pequeñas se suele dar con mucha frecuencia que se superpongan los dientes, por la falta de espacio y porque el diente "bueno" no tiene suficiente fuerza para hacer caer al de leche. Si no se corrige con metodos tradicionales, la visita al veterinario es obligada.

Si bien muchas razas caninas no disponen de una dentadura completa, por falta de espacio, por faltas heredadas genéticamente debido a la selección etc, la mordida natural, la boca completa, está compuesta por 42 piezas.

También es importante subrayar que hay diferentes tipos de bocas, distintas mordidas dependiendo de como estén posicionados los dientes.


Tipos de Mordida



Mordida en tijera: 
La mas normal, la mas natural de las mordidas, en la que la cara interior de los incisivos superiores, roza la cara exterior de los incisivos inferiores. Los caninos superiores cierran pegados por detras de los inferiores. Ejemplo: Rottweiler 





Mordida en pinza:
 
Los incisivos superiores e inferiores se chocan entre si, cerrando paralelamente. Los caninos cierran igual que en la tijera. Tienen el inconveniente de que desgastan los incisivos más rápidamente que otras mordidas. Ejemplo: Dogo Argentino 




Mordida prognata: (Prognatismo)
Podría considerarse como falta, pero es parte del estándar racial de muchas razas, los incisivos inferiores están adelantados respecto a los superiores, y los caninos inferiores también cierran por delante de los superiores. Ejemplo: Dogo de Burdeos




Mordida enognata: (Enognatismo
Constituye una falta clara, en la cual, los incisivos inferiores quedan retrasados respecto a los superiores, habiendo un espacio entre ellos cuando cierra la boca. Se trata de una falta, por lo que no hay razas cuyo estandar marque este tipo de mordida. 


A continuación una buena gráfica para diferenciar y ver los distintos tipos de mordida. 





Músculos relacionados con la mordida.
Los músculos masticadores son los encargados de abrir la boca (y por lo tanto de cerrarla), en este grupo y centrandonos en los dos mas importantes, encontramos los músculos temporal y masetero. Sin embargo, no hay que olvidar que la fuerza mandibular de un perro, no solo viene de los músculos faciales, sino apoyados por los musculos del cuello.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Consigue el respeto de tu perro

Los perros son animales que viven en manada, y en toda manada hay un líder al que sigue el resto del grupo. Desde que un perro entra en nuestra casa, debemos hacerle ver que nosotros somos su líder, somos los que mandamos y por lo tanto debe obedecernos.

Si nos fijamos en la naturaleza, ningún animal pega a otro con un periódico, con palos, con su propia correa, y tampoco le grita si ha hecho algo mal. Si nos queremos convertir en el líder de nuestra manada debemos ser firmes, enérgicos, pero no podemos estar histéricos, ni excitados. Ante todo, no podemos humanizar al animal, él no nos entiende, no entiende nuestro enfado. Nuestras correcciones no pueden ser agresivas ni ansiosas, deben ser firmes y sobretodo, deben realizarse en el mismo momento en el que nuestro perro ha hecho algo mal. Aunque creamos que tenemos el perro más listo del mundo, y que él sabe que ha hecho algo mal ya que se encoge o agacha la cabeza, no es así. Simplemente, tiene miedo a nuestra reacción, a nuestra agresividad, y la única forma de calmarnos es meter el rabo entre las patas y agachar la cabeza.

Con golpes y gritos lo único que vamos a conseguir es que nuestro perro se convierta en un perro miedoso, con ansiedad, agresivo. En la naturaleza el líder de la manada es afectuoso y benévolo, no es en ningún momento intimidante ya que tiene confianza en sí mismo.

Mediante estos 10 pasos conseguiremos que nuestro perro nos respete y confíe en nosotros:
  1. Evitaremos que nuestro perro duerma en lugares valiosos para nosotros, como la cama, el sillón, umbrales de las puertas o zonas de paso. Si consigue dormir en la cama o el sillón se fortalecerá, será el líder. Si le permitimos estar en umbrales de puertas o en las zonas de paso, cada vez que queramos salir de una habitación le tendremos que pedir permiso, y eso también le convertirá en el líder. 
  2. Él no iniciará los juegos y tampoco los terminará, somos nosotros quienes lo haremos. Nuestro perro necesita juegos y ejercicio pero no debe marcarnos una rutina, nosotros debemos marcársela a él. Durante los juegos no permitiremos que nos rete, es decir, no permitiremos que nos ladre, nos muerda o nos empuje.
  3. No iremos a acariciarlo, lo llamaremos, el vendrá y entonces tendrá caricias y mimos. Si quiere algo se lo tendrá que ganar. 
  4. Pasará por las puertas siempre detrás de nosotros. Por mucho que tire de la correa para salir a la calle, no podemos permitirle ir en primera posición, ese es nuestro puesto. 
  5. Cuando lleguemos a casa no lo acariciaremos salvo que esté tranquilo. Si nos salta encima no es que se alegre de vernos, nos intenta demostrar quién manda. Una vez que se haya tranquilizado, lo llamaremos y lo saludaremos. 
  6. Comerá en su cacharro, nunca antes ni a la vez que comemos nosotros. En la naturaleza, el líder es el primero en comer, y el resto del grupo se espera hasta que él está saciado. Asimismo, no le dejaremos que ponga su hocico sobre la mesa ni que se acerque a nuestros alimentos. 
  7. Mediante su adiestramiento, el aprendizaje de órdenes básicas, le demostraremos que tiene que obedecernos. Esto, aunque pueda parecer un abuso, nos ayudará a controlar a nuestro animal y a evitar posibles travesuras o malos comportamientos. 
  8. El ejercicio es fundamental en la vida de nuestra mascota. Un perro con exceso de energía será difícil de controlar y no nos respetará. Es muy importante que le proporcionemos el ejercicio necesario para que esté tranquilo y consuma su parte ansiosa y agresiva. 
  9. Debemos marcarle límites, reglas y normas para convivir en nuestro hogar. Es importante, que al igual que cuando convivimos con otro ser humano, en nuestra casa haya una cierta disciplina, así nos podremos respetar mutuamente. 
  10. Para que la jerarquía que queremos sea efectiva, no podemos darle más privilegios que a otro miembro de nuestra casa. Por mucho que queramos a nuestra mascota, debemos enseñarle que todos nuestros amigos, vecinos y familiares están en una escala superior y que los debe respetar. Para este punto es recomendable hacer que nuestro perro sea sociable, tanto con las personas como con otros animales.

¿Agresividad o Dominancia?

En estos tiempos en los que todos jugamos a aprendices de etólogo, es frecuente escuchar el término “perro dominante” aplicado al perro peleón o pendenciero, y de igual forma se aplica “agresividad por dominancia” a los casos en los que el perro ¿dominante? comienza la pelea o el altercado sin motivos aparentes. En ambos casos el concepto “dominante” no está siendo utilizado de forma correcta.Agresividad no es sinónimo de dominancia.

El “perro dominante”. Con frecuencia se confunde al perro realmente dominante (después lo definiremos)
 con un perro mal socializado. Un perro que no sabe comportarse ni con sus congéneres ni en su entorno, pero no porque sea dominante, sino porque desconoce las reglas del juego y -en la mayoría de los casos- su inseguridad le lleva a reaccionar con agresividad. El perro peleón no es el dominante, ni el sumiso, sino el que ocupa escalones intermedios y busca “su sitio”. El verdadero perro dominante es un animal tranquilo, seguro de sí mismo, que nunca reacciona con agresividad sin motivo y no provoca altercados gratuitamente, tal vez sea insolente y desafiante, pero no agresivo. No reacciona con agresividad a estímulos menores, sino que los ignora, ya que es un animal seguro de sus posibilidades. Un perro dominante puede manifestar, o no, agresividad por dominancia. Un perro de estas características es un animal duro y muy complicado para personas sin experiencia, que explora los límites y los supera (con otros perros y también con los humanos) porque él se siente por encima. Reconducir/modificar esa conducta es posiblecon tiempo y técnicas apropiadas, pero no está al alcance de cualquiera sin experiencia ni es tan sencillo como forzar la postura de sumisión (alpha roll over). La figura del profesional caninocualificado es imprescindible para conseguir resultados positivos, fiables y duraderos.

La agresión es un problema de la conducta canina más frecuente, por el cual los perros son llevados al veterinario o a centros de adiestramiento.

El término agresión no es muy conciso, haciendo referencia a la conducta amenazante o peligrosa dirigida hacia un individuo o grupo.

La agresividad en los perros ha de entenderse, en términos generales, como un conjunto de factores entre los que se encuentran:

Ambientales(animal encadenado).
Genéticos( razas). 
Fisiológicos( animal no castrado).
Motivacionales (defensa).
Instrumentales (experiencia traumática o enseñada).
Patológicos(dolor, molestia).

Como consecuencia de este fenómeno, se puede
encontrar distintos grados de violencia canina que deberán ser tratados por especialistas de formas diferentes.

La agresividad es una conducta natural de los perros que permite regular las relaciones entre los miembros de una manada, y entre éstos y los otros animales. En el entorno doméstico esto se puede convertir en un problema que dificulte la convivencia del animal con las personas.

La clasificación de la conducta del perro más utilizada incluye los siguientes tipos de agresividad canina:

Agresividad con causa orgánica:
 

Esta forma de agresividad incluye tanto la agresividad causada por el dolor como aquella que es consecuencia de un problema orgánico, como los problemas hepáticos o el hipotiroidismo, suponiendo entre el 15 y el 20% de los casos.

Agresividad sin causa orgánica:

Agresividad por dominancia.
Agresividad por miedo.
Agresividad territorial.
Agresividad en el juego.
Agresividad depredadora.
Agresividad redirigida.
Agresividad maternal.

La agresividad por dominancia es el tipo más frecuente en el perro, suponiendo entre el 40 y el 80% de todos los casos, seguidos de la agresividad por miedo y la agresividad territorial.
Los perros han evolucionado a partir de los lobos y estos manifiestan una conducta social y una organización jerárquica que implica un animal líder en la cúspide, el cual controla las situaciones o la conducta de otros miembros del grupo.

La agresión por dominancia se puede manifestar cuando un determinado perro se da cuenta queestá siendo desafiado o de que esta perdiendo el control de un recurso o de una situación a favor de un subordinado (un perro o una persona). Si la agresión se manifiesta, está influida por numerosos factores.

Por este motivo, los perros que han establecido la dominación sobre una determinada persona pueden reaccionar de modo agresivo si la persona se acerca cuando el animal esta comiendo o descansando o si una persona manifiesta signos sociales de dominancia.

La
 agresividad por miedo es desencadenada por un estimulo miedoso, que puede manifestarse cuando el perro es amenazado o castigado. Generalmente se presenta cuando el perro es incapaz de eludir el estímulo que provoca la respuesta de miedo.

Las causas más frecuentes de esta agresión son la socialización insuficiente y el castigo inoportuno y la genética puede desempeñar un papel en la determinación del umbral correspondiente a una respuesta de miedo.

La agresividad territorial se presenta cuando la conducta agresiva va dirigida hacia una persona o hacia otro animal que no considera miembro de la manada pudiéndose manifestar agresión hacia las personas o hacia otros animales que se acercan a los miembros de la familia.

La agresión territorial puede verse exacerbada si el perro está atado o encerrado.

Descubrir las causas que llevan a un perro a comportarse de forma agresiva es un proceso similar a deshojar una margarita o pelar una cebolla: tendremos que ir eliminando posibilidades hasta dar con el motivo real.

De este modo, la primera pregunta que tendremos que hacernos es: ¿Lo provoca un problema de conducta o hay un origen clínico? Esto sólo puede responderlo nuestro veterinario, tras un examen clínico del perro y que hemos comentado con anterioridad. 

Hay causas patológicas que requieren un tratamiento complicado, pero también existe la llamada“agresividad inducida por dolor”. Problemas tan
comunes como una inflamación del oído que acabe en agresividad hacia aquellos que se encuentren próximos al animal. Debemos ser conscientes de que el perro no tiene capacidad de pensar de forma abstracta: para él, si siente dolor ahora es porque algo o alguien le lastima ahora, y culpará a la persona u animal más cercano. Es por ello que debemos someter al can a un examen completo, con el propósito de localizar la fuente del dolor y tratarla para eliminarlo.

Si tras un análisis veterinario no hay causa aparente de la agresividad, estaremos hablando de un problema de conducta. Llegado este punto tendremos que seguir deshojando la margarita: 

¿Nuestro perro es dominante o sumiso? Cuando llega al parque ¿Se dirige directo al centro del grupo de perros que estén jugando o por el contrario hay que “invitarle” a acercarse? ¿Se coloca delante de nosotros de forma longitudinal, de frente a los perros o se sitúa de forma transversal, como si nos impidiera el paso con el cuerpo y se reclina sobre nosotros? Es importante saber si nuestro perro es dominante o sumiso, pues la forma de proceder en ambos casos es muy diferente.

Si el perro es dominante podemos encontrar diferentes tipologías de agresividad, como las enumeradas al principio.

En el otro lado de la balanza se encuentran los perros excesivamente sumisos, que suelen mostrar la agresividad por miedo.

Cada tipo de violencia responde a un impulso concreto, busca resolver una situación concreta, y por tanto hay soluciones diferentes. Asimismo, cada perro es distinto al resto. En su comportamiento afectan factores propios de los perros tan variados y a la vez determinantes como son el sexo, la edad o la disposición genética, pero también afectan otros valores como la edad a la que fue retirado del contacto con su madre y hermanos o la forma en que se ha llevado el periodo de socialización, fundamental para todo animal social, y cuyos artífices somos nosotros, los propietarios. 

Por ello no es justo achacar toda la culpa de un mal carácter al perro, nosotros tenemos mucha responsabilidad en ello.
 Y tampoco es útil sentirse mal por un fallo en su educación causado por la falta de información. Siempre es buen momento para reconducir a un perro, tan solo hace falta tener interés en ello y paciencia. Y, asombrosamente, todos los perros tienen la capacidad de cambiar de actitud.

¿Y cómo erradicar la agresividad? Una vez determinado el tipo de agresividad que presenta el perro es más sencillo, pues podemos atacar solamente a la raíz del problema, sin estropear su carácter. 

Algunas tipologías, como la Competitiva-posesiva, la Dominante-jerárquica, la Territorial o la Aprendida-impulsiva se dan siempre bajo un mismo factor: ausencia de unas limitaciones claras y bajo nivel de liderazgo humano.

Para 
ello existen un gran número de actos “rituales” que se deben adoptar (la forma de entrar y salir de casa, de darles la comida o de ubicarles para dormir, etc.) que ayudan a que el perro descubra la nueva actitud del propietario, dispuesto ahora a asumir el mando y a cubrir todas esas necesidades que el perro requiere. Como asesores debemos ayudar a los propietarios a adoptar esa nueva figura, la del líder. 

Aprender a corregir el paseo es fundamental, pues si el perro asume que no es él quien toma las decisiones en la calle esperará a que seamos los humanos los que le digamos cómo obrar.

Para tratar la agresividad por miedo tendremos que, por igual, reforzar nuestra imagen de líder y elevar la autoestima del perro, desensibilizándolo de aquello que le 
provoca el miedo
Será preciso enfrentar al perro al motivo de su miedo y estimularlo para cambiar su percepción de la causa, hasta el momento negativa, por algo más positivo y menos amenazador. Tan solo lograremos que un perro abandone una conducta agresiva hacia los perros logrando que entre voluntariamente dentro de un grupo numeroso de estos y ayudándole a comprobar que no tiene por qué pasarle nada malo. En este caso,la firmeza y la suavidad tendrán que estar estrechamente ligadas, para que el animal perciba un modo de actuar seguro y firme pero confiado y tranquilo.

Cuando Llamar al Veterinario

Esta información puede ser útil, para que cuando se dé un caso en el que dudes y no sepas que hacer con tu perro porque está malito, para que puedas valorar cuando existe un verdadero problema para llamar al veterinario o cuando puede esperar.

Viendo la evolución de la patología que tiene el animal y llevarlo a la consulta, o bien si tu perro está enfermo o lesionado y tienes dudas de la gravedad de la enfermedad, siempre será mejor ser precavid@ y llamar de inmediato a un profesional.



Llévalo urgentemente a una clínica si tu perro: 


1) Tiene signos de enfermedad cardiaca o respiratoria: 
 
  • No hay pulso o latidos del corazón.
  • Ausencia de respiración o dificultad respiratoria severa.
  • Lengua y encías azuladas o blancas.
  • Principio de ahogamiento.


2) Ha ingerido un tóxico o veneno o ha tenido un traumatismo: 
 
  • Fractura de una extremidad, parte corporal o una herida donde se observa el hueso.
  • Sangrado abundante que no se puede detener.
  • Una lesión en el ojo, el ojo está fuera de la cuenca o saliente.
  • Una pelea, sobre todo si fue con un gato o un animal salvaje.
  • Una herida de bala.
  • Ser atropellado por un vehículo.
  • Heridas punzantes en el abdomen o tórax.
  • Cualquier tipo de traumatismo en la cabeza.
  • Una mordedura de serpiente, escorpión, alacrán o araña venenosa, o si ha mordido un sapo.
  • Púas de puercoespín incrustadas en la boca, cara o cuerpo (en países donde existan estos animales).
  • Un diente quebrado, o pérdida de un diente sano, incluyendo la raíz.
  • Una laceración severa, o una incisión quirúrgica que se ha abierto y la piel está abierta.
  • Caída desde una gran altura, balcón, ventana… etc.
  • Hinchazón de la cara y /o urticaria.

3) Lesiones relacionadas con el frío, calor u otro tipo de energía: 
 
  • Masticar un cable eléctrico y recibir una descarga o quemaduras.
  • Inhalación de humo.
  • Golpe de calor o fiebre de más de 40.5°C ó 105°F (normal es menos de 39°C ó 102,5°F).
  • Congelación o hipotermia (bajada inusual de temperatura).




4) Tiene signos de malestar gastrointestinal, incluyendo: 
 
  • Esfuerzo continuo, pero no puede defecar.
  • Hinchazón (abdomen parece grande o intentos devomitar, pero no elimina nada).
  • Asfixia.
  • Vómitos de sangre o vómitos continuos.
  • Ingestión de un cuerpo extraño (por ejemplo, un juguete…).
  • Diarrea con sangre con olor desagradable.
  • Heces de color negro alquitranado.
  • Sangrado del recto o prolapso del mismo.
  • Sobredosis de la medicación o sospecha de intoxicación.


5) Tiene signos de enfermedad del sistema nervioso o músculo-esquelético, incluyendo: 
 
  • Letargo extremo o depresión, pérdida de conciencia,colapso o estado de coma.
  • Convulsiones.
  • Inclinación de la cabeza, nistagmus (los ojos se mueven rápidamente de lado a lado), tambaleándose, caminando en círculos, no puede desplazarse con las extremidades traseras u otros problemas en el desplazamiento.
  • Dolor severo o continuo.
  • Incapacidad repentina para soportar el peso de una o más extremidades.

6) Tiene signos de problemas urinarios o reproductivos: 
 
  • Dificultad para dar a luz: el cachorro no nace después de 24 horas de comenzar el trabajo de parto, sin nacimiento del cachorro después de 1 hora de esfuerzo activo, más de 4 horas entre cachorro y cachorro; contracciones débiles o poco frecuentes una vez que el parto ha comenzado, no se pudo iniciar el parto en 24 horas y la temperatura disminuya por debajo 37°C ó 99°F, gemidos o lamer la zona genital en exceso, sangrado o flujo vaginal anormal, debilidad.
  • El pene está expuesto y no pueden ser reintroducido en el prepucio (área cubierta de pelo que por lo general incluye el pene).
  • Esfuerzo continuo pero no pueden orinar (anuria) o la orina tiene sangre (hematuria).
  • Gemidos de dolor al intentar orinar.
  • Sangrado de la zona urinaria o genital.

Llama a tu veterinario el mismo día si el perro: 

1) Tiene signos de enfermedad cardiaca o respiratoria, incluyendo: 
 
  • Dificultad para respirar, respiración superficial, o frecuencia más rápida (no asociada con el ejercicio físico o la temperatura del medio ambiente).
  • Tos o estornudos continuos.

2) Tiene signos relacionados con la digestión, la alimentación y el consumo de agua: 
 
  • No comer o beber durante 24 horas.
  • Vómitos o diarrea por más de 24 horas y el animal se encuentra aletargado.
  • Beber agua en exceso, no vinculados a la actividad física o la temperatura del medio ambiente.

3) Tiene signos de enfermedad del sistema nervioso o muscular: 
 
  • Un cambio repentino en el comportamiento.
  • Gemir cuando es tocado o recogido.
  • Ojos opacos, entrecerrar los ojos, o parece no poder ver.
  • Súbita y severa cojera.





4) Tiene signos de problemas reproductivos:
  • Si la perra que está preñada o amamantando a su cría se le inflaman las mamas y siente dolor al tacto.
  • Si el perro tiene inflamación de testículos o escroto.
  • Placenta retenida durante más de 8 horas.

5) Tiene signos asociados con la piel, incluyendo: 

  • Una erupción con supuración excesiva, morderse o rascarse la piel.
  • Bultos anormales o protuberancias que son dolorosas, enrojecidas y/o caliente al tacto.
  • Gusanos (miasis).
  • Un sangrado por la nariz sin razón aparente, moretones, o puntitos rojos en la piel.

Contacta con tu veterinario en 24 horas si tu perro tiene síntomas como: 

1) Tiene signos relacionados con la digestión o la alimentación y el consumo de agua: 

  • No comer, pero sin otros signos de enfermedad.
  • Heces blandas, pero no hay dolor, sangre, olor fétido, verde o negro, moco.
  • Vómitos ocasionales (2 ó 3 veces), pero no tiene dolor abdominal o sangre.
  • Mal aliento.
  • Aumento o pérdida de peso repentino.
  • Babeo.

2) Tiene signos de enfermedad del sistema nervioso o muscular: 

  • Debilidad por más de 24 horas.
  • Inflamación de las articulaciones.
  • Letargo, depresión, dormir más de lo habitual, falta de voluntad para jugar o hacer ejercicio.


3) Tiene signos asociados con la piel: 

  • Picazón moderada u olor desagradable de la piel.
  • Secreción del ojo u oído.

sábado, 21 de diciembre de 2013

Razas de perros más inteligentes

De 1 a 10:

Las 10 razas con la inteligencia funcional y de obediencia más alta. Menos de cinco ejercicios para entender ordenes nuevas. Capacidad de recordar sin necesidad de practicar las pruebas repetidamente. Responden a la primera orden el 95 % de las veces como mínimo. Tienen una rápida respuesta aunque sea a una cierta distancia. Aprenden correctamente siendo adiestrados por entrenadores relativamente inexpertos.

1. Borde Collie.

2. Caniche o Poodle.

3. Pastor Alemán.

4. Golden Retriver

5. Doberman.
6. Pastor de Shetland.

7. Labrador Retriever.

8. Papillón.

9. Rotweiller.

10. Cattle Dog Australiano.


De 11 a 26:

Perros de trabajo excelentes. Aprendizaje de órdenes sencillas entre 5 y 15 repeticiones del ejercicio. Recuerdan con facilidad pero mejoran con la práctica. Responden a la primera orden sobre el 85 % de las veces. Para órdenes más complejas necesitan más tiempo. Posiblemente a una cierta distancia del dueño tarden un poco en responder. Prácticamente todos los entrenadores podrán obtener buenos resultados de ellos.


11. Pembroke Welsh Corgi 

12. Schnauzer MiniaturaJack Russell 

13. Springer Spaniel Inglés 

14. Pastor Bélga Terviuren 

15. Pastor BelgaSchipperke 

16. CollieKeeshound 

17. Pointer Alemán de pelo corto 

18 .Cocker Spaniel InglésFlat Coated Retriever, Schnauzer Mediano

19. Spaniel Bretón o Brittany 

20. Cocker Spaniel Americano 

21. Weimaraner 

22. Bernes de la Montaña, Pastor Bélga Malines 

23. Pomerania 

24. Irish Water Spaniel 

25. Vizsla 

26. Cardigan Welsh Corgi 


De 27 a 39:

Perros de trabajo con un nivel superior a la media. Necesitan entre 15 y 30 repeticiones para aprender un ejercicio. Prácticas adicionales del ejercicio en las primeras fases del aprendizaje lo mejoraran. Una vez aprendida una orden normalmente la retienen. Suelen responder a la primera un 70 % de las veces o más. El comportamiento es parecido a los perros del grupo anterior pero con una cierta inseguridad y demora en la respuesta. Si el dueño está muy lejos, el perro no reaccionará a la orden. Un adiestramiento inconsecuente, de baja calidad o con demasiada severidad e impaciencia no logrará buenos resultados. 
27. Chesapeake Bay Retriever, PuliYorkshire Terrier 

28. Perro de Agua PortuguésSchnauzer Gigante 

29. Airedale TerrierBoyero de Flandes

30. Border TerrierPastor de Briad 

31. Welsh springer spaniel 

32. Manchester Terrier 

33. Samoyedo 

34. Bearded CollieField Spaniel , Gordon SetterStaffordshire Terrier AmericanoTerranova,www.perros.com/razas/terrier-australiano/

35. Cairn TerrierKerry Blue TerrierSetter Irlandes Rojo 

36. Elkhound 

37. AffenpinscherClumber SpanielPharaon HoundPinscher MiniaturaSetter InglésSilky Terrier 

38. Norwich Terrier 

39. Dálmata 

De 40 a 54:

Corresponde a la puntuación media de inteligencia funcional y obediencia. Necesitan de 25 a 40 repeticiones para comprender bien un ejercicio. Las prácticas adicionales les ayudarán en la fase inicial del aprendizaje. Si no repiten los ejercicios con frecuencia recordarán las órdenes con dificultad. Responden a la primera un 50 % de las veces y la efectividad depende mucho de las horas de práctica y repetición de los ejercicios. La rapidez de respuesta es más lenta. A mayor distancia la respuesta del perro será menos consistente y predecible. Necesitan de un adiestrador experto con mucha paciencia. 

40. Bedlington TerrierFox Terrier Pelo LisoSoft-coated Wheaten Terrier 

41. Curly-coated RetrieverIrish Wolfhound 

42. KuvaszPastor Australiano 

43. PointerSalukiSpitz Finlandés 

44. Cavalier King Charles SpanielCoonhound Negro y Fuego, Pointer Alemán de pelo duro,Spaniel Americano de Agua 

45. Bichon FriseEnglish Toy Spaniel, Husky Siberiano 

46. Foxhound AmericanoGalgo o GreyhoundOtterhound, Spaniel Tibetano 

47. DeerhoundWest Highland White Terrier 

48. Boxer, Gran Danés 

49. Dachshund o Perro SalchichaStaffordshire Bull Terrier 

50. Malamute de Alaska 

51. Fox Terrier Pelo DuroShar Pei, Whippet

52. Rhodesian Ridgeback 

53. Terrier IrlandésWelsh Terrier 

54. Akita InuBoston Terrier 

De 55 a 69:

Nivel mínimo de inteligencia funcional. Necesitan de 40 a 80 repeticiones para obtener un rendimiento aceptable (A veces, hasta unas 25 repeticiones no muestran signos de comprensión). Necesitan muchas repeticiones para mantener un nivel aceptable. Responderán a la primera orden un 30 % de las veces. Trabajan mejor si el dueño está cerca de ellos. Estos perros parecen distraídos la mayor parte del tiempo y solo responden cuando les apetece. Si la distancia entre el perro y el dueño es grande no habrá respuesta. No son razas convenientes para dueños primerizos. Un entrenador con mucha experiencia, tiempo, firmeza y cariño puede lograr un buen rendimiento de ellos. 

55. Skye Terrier 

56. Norfolk TerrierSealyham Terrier 

57. Pug 

58. Bulldog Frances 

59. Griffon de BruselasMaltés 

60. Greyhound Italiano 

61. Crestado Chino 

62. Chin Dandie Dinmont TerrierLakeland TerrierPetit Basset Grifon Vendeen, Terrier Tibetano 

63. Viejo Pastor Ingles 

64. Gigante de los Pirineos 

65. San BernardoTerrier Escocés 

66. Bull Terrier 

67. Chihuahua 

68. Lhasa Apso 

69. Bullmastiff 

De 70 a 79:

Son las razas con inteligencia funcional y obediencia más bajo. En el aprendizaje inicial necesitan unas 30 o 40 repeticiones para mostrar síntomas de entendimiento a la orden. Es frecuente que sean necesarias unas 100 repeticiones de un ejercicio antes de dar un resultado fiable. Su respuesta es lenta y desigual. Finalizado el aprendizaje se han de hacer repeticiones frecuentes si no los resultados serán imperceptibles como si jamás hubieran aprendido ningún ejercicio. Algunos califican a estas razas como "imposibles de adiestrar". La reacción a la primera orden es de menos del 25 % de las veces. A veces dan la espalda a sus dueños, ignorando sus órdenes o desafiando su autoridad. La respuesta a las órdenes suele ser insegura y lenta, a veces a disgusto. Pueden frustrar a más de un adiestrador medianamente experimentado y hacer dudar de Sus aptitudes a uno de los más especializados. Siempre se deberá tener en cuenta que existe una relación muy fuerte entre el dueño y el resultado y la actuación final de cada perro en las evaluaciones.

70. Shih Tzu 

71. Basset Hound 

72. Beagle , Mastiff 

73. Pequinés 

74. Bloodhound 

75. Borzoi 

76. Chow Chow 

77. Bulldog 

78. Basenji 

79. Afgano